“El riesgo de que se produzca un incidente no se puede descartar por completo”, afirmó la Red Europea de Gestores de Redes de Transporte de Electricidad (ENTSO-E, por sus siglas en inglés) el pasado martes en relación al eclipse solar total previsto para el 20 de marzo. El fenómeno, que deberá de comenzar a las 8:40 para terminar a las 12:50 (hora centroeuropea), será “una prueba sin precedentes para el sistema eléctrico de Europa (…) Toda la zona está preocupada directa o indirectamente“, informa el diario británico ‘The Financial Times’.
Asimismo, según la ENTSO-E, Alemania es el país europeo con mayor riesgo de sufrir las consecuencias de este fenómeno, ya que actualmente una cuarta parte de su ‘mix energético’ depende de generadores de energía renovable.
“El eclipse será una ‘prueba de estrés”de la flexibilidad del sistema energético europeo“, ya que “tendrá que adaptarse a un cambio muy abrupto”, establece Patrick Graichen, director ejecutivo de Agora Energiewende. “En 30 minutos la producción de energía solar podrá disminuir desde 17,5 a 6,2 gigavatios, para después ascender a 24,6 gigavatios”, explica. “Definitivamente, va a ser un gran desafío para las salas de control”, advierte Claire Camus, portavoz de la ENTSO-E.
La última vez que Europa experimentó una situación similar fue en agosto del año 1999, mucho antes de que el desastre de Fukushima catalizara el desarrollo en masa de los paneles solares y ello impulsara la electricidad a partir de energía fotovoltaica. Se trata del primer fenómeno de estas características que se produce con el grado de dependencia actual de Europa de la energía solar, que ha pasado de representar el el 0,1% de la electricidad del continente en 2002 al 20,5% de hoy.
FUENTE: http://tudcln.com/